Yo, de pequeño, en el colegio, era un blanco fácil. “Gordo”, “Gafotas”, “sabiondo”, etc. Claro está que no para todo el mundo, porque todo el mundo no me insultaba, y claro está, que no en todo momento, porque no sucedía todos los días, si no unos pocos. Los críos son crueles, ya se sabe, y como no se inhiben como los adultos, hacen mella en lo evidente y en donde a esas edades duele con facilidad. Los matones de patio también siempre han existido, como las víctimas de estos, eso no es, ni será nada nuevo. Uno intentaba evitarlos, y sí no podía no tenía otra que aguantar el chaparrón hasta que sonaba la campana o la sirena y volvía a su casa, donde con su familia y la pandilla las cosas cambiaban de color en uno de esos pocos, pero existentes, malos días.
Las cosas han cambiado. No en lo básico, pero sí en las formas, y el uso de la tecnología ha traído grandes ventajas para los escolares, sin lugar a discusión alguna. Pero tampoco admiten que para esa minoría de matones, que siempre andaban escoltados de otros, también las tienen. Hoy leía un artículo del diario Colombiano El tiempo donde se hablaba de ello. Al parecer a la policía 465 denuncias en un semestre les parece demasiado.
Alguien, un profesor de Harvard y no un indocumentado de Vallekas como este que escribe, también cree que las cosas son diferentes. Redes sociales como Facebook y Myspaces son utilizadas para estos fines, el anonimato de los matones complica mucho las cosas y el silencio de los que lo sufren (antes también) lo hace muy difícil de detectar. Cyberbulling lo llaman en inglés. Ciber acoso, o maltrato escolar a través de la red. Y a diferencia, y está sí que es grande, con otros tiempos, este acoso dura 24 horas, y no el tiempo en que uno estaba al alcance de quien lo acosaba, y estando los jóvenes conectados muchas horas pueden causar mucho daño en los menores.
No es un problema nuevo, pero si tiene matices que para quien lo sufre puede llegar a hacerlo grave. Permítanme unos consejos claros y entendibles para sus hijos si detectan o sospechan que lo están sufriendo:
1) Conversen y hablen con ellos. Interésense por sus actividades en la red. Pregúntenles si tienen algún problema en su navegación. Esa es la herramienta más poderosa que cualquier filtro, espiar sus correos, o mirar desde el trabajo el perfil de su hijo en una red social. Cuéntenles sus experiencias en ese sentido. En algún momento todos fuimos Gordos, flacos, gafotas, largos, etc.
2) Expliquen a sus hijos la importancia que tiene el publicar imágenes, comentarios, textos, de tal manera que sepan que todo eso puede ser utilizado por gente en su contra. Díganles que todo eso sólo deben compartirlo con gente cercana y conocida en la que tengan la más absoluta confianza.
3) Si él respeta, pero no es respetado en la red y por tanto es un caso de acoso, en un chat, en el Messenger, en su red social, enséñeles que es mucho más práctico bloquear, no agregar, eliminar a quien le intenta dañar, sin hacer más caso, que enfrentarse a él en sus mismos términos. La red tiene esa ventaja también. Ignorar es mucho más sencillo. Por supuesto intente, si es posible, identificar a sus agresores.
4) Si su hijo accede a ello, o ustedes tienen pruebas de que lo están sufriendo guárdenlas, les serán útiles a la hora de denunciar la situación si la cosa creen que es grave.
5) Enséñenles a respetar a los demás. Alguien que no respeta, insulta, o practica estos acosos es un candidato ideal para sufrirlos.
6) Sobre cualquier cosa muéstrenles que sus padres, sus amigos de verdad y demás, están para ayudarlos, y que pueden hacerlo de una manera que a ellos en ningún caso les traerá más problemas que los actuales. No los atosiguen, ni les agobien. El tema es ayudarlos, no fiscalizarlos y sobre todo no hacerles culpables de una situación en la que ellos son victimas, no verdugos.
Ahora bien, muchas veces por desconocimiento, los padres no son capaces de dar con los métodos adecuados que la misma red ofrece para solucionar parte del problema, o en su totalidad. Ahí les va un poco de ayuda
Todos los servicios de la red tienen un enlace para reportar abusos. Algunos funcionan mejor, otros peor. Para que tengan claro donde pueden comunicar estos hechos les dejo algunos enlaces, y direcciones de correo y teléfonos que permiten a padres y tutores el canalizar el problema a una solución incluso manteniendo al margen a su hijo, si lo consideran necesario.
Para eliminar el perfil de tu hijo si es menor de 13 años puedes ir a este enlace.
http://www.facebook.com/safety/#/help/contact.php?show_form=underage
Si alguien está falseando su identidad o suplantándola para ridiculizarle o molestarle
Para otros casos
Email : abuse@facebook.com
Tuenti
Correo para abusos y dudas
Email : soporte@tuenti.com
Windows Live
Formulario para informar de abusos
https://support.live.com/?scrx=1
Yahoo
Cualquier tipo de abuso
http://help.yahoo.com/l/es/yahoo/messages/abuse.html
Y por supuesto para casos muy graves
Dirección General de la Policía
Grupo de Protección al Menor en el Uso de las Nuevas Tecnologías
Unidad de Investigación de la Delincuencia en Tecnologías de la Información
Tlf: 91. 582 23 58
Email : denuncias.pornografia.infantil@policia.es
Guardia Civil Española
Policía Judicial
Dpto. de Delitos contra las Personas
Tlf: 91. 514 60 00 Ext.:8376/8377
Email: uco@gcivil.mir.es
Espero que todo esto les sea útil
Saludos
marcelino, este artículo tuyo debería de permanecer varias semanas como portada en los agregadores sociales. magnífico por simple y directo. voy a enlazarlo desde mi blog.
Gracias, pero ten por seguro que no será así
quizás me gustó porque aquello de ser padre y saber cómo duele que les duela. por mi parte gracias. y ya está «trackbaqueado» 🙂
Gracias a ti ac24 ;D
Yo he sido víctima del bullying y mis padres y mi familia siempre han estado ahí. Soy una chica que nunca ha entrado en inguna polémica, ha sacado siempre buenas notas y ha crecido en un entrono normal, con una familia que se interesaba, y aun se interesa en todo lo que hago, y aún así, he sido víctima del bullying. All igual que yo, muchas amigas mías han sido vapuleadas verbalmente en numerosas ocasiones, hasta tal punto, que todas tuvimos que cambiarnos de instituto. Aún nos quedan ciertas secuelas, no lo definiría como miedo, pero sí respeto cuando nos cruzamos con las personas que en su día nos lo hicieron. Muchos dicen: son chiquilladas, son cosas de niños, cuando sean mayores serán escoria ytú serás una persona de provecho bla bla bla y es cierto, pero no consuela, porque ellos serán escoria pero tienen la conciencia limpia, el resto tendremos que enfrentarnos a nuestros «miedos» para el resto de nuestras vidas.
#5
Lo siento muchísimo :C ¿Tuviste algún tipo de ayuda para evitar el acoso a través de la red?
En mi caso, es bullying de la vieja escuela, de la que te dejan anónimos debajo del pupitre rubricados con un «anónimo». En el caso de la ayuda, sí la tuve: de mis padres y de la gente que te apoya, pero son muchos los que te empiezan a ver como un bicho raro. Lo peor de todo lo que recuerdo, era tener que volver a clase al día siguiente y ser el centro de miras de todo el mundo. Tener que dar la cara por algo que te han hecho ¿injusto verdad?. Lo que más me duele quizá es que todo el mundo dice que la Ley está ahí, para cumplirla, pero no es cierto, porque a mí nadie me ha prestado ayuda psicológica, nadie me ha indemnizado por mis daños (que serán para siempre). Sin emabrgo, sí se han creado leyes para castigar al menor. Pero es todo un lugar donde escudarse: soy menor, por lo tanto soy intocable.
Al igual que las redes sociales: es un escudo perfecto para amenazar porque la cobardía de esta escoria hace que actúen desde detrás de una pantalla.
Si me preguntáis dónde está el probelma, os diría que en la educación que ha recibido, por lo tanto radicaría en los padres. Sin embargo, si me preguntas cómo deberían responder ante estos actos, los hijos son los que deben responder, por supuetos, pero todos ellos deberían ser tratados desde un punto de vista psiquiátrico porque no es muy normal que un hijo cometa delitos y los padres, para colmo, se sientan ofendidos.
:C
Información muy precisa, lo tendré muy en cuenta. Un saludo y un gracias mi estimado Marcelino.
No hay de que estimada Marta
Genial artículo que todos los padres deberían tener a mano, sobre todo si sus hijos están en ‘el pavo’.
Yo también sufrí bullying, pero fue a pie de calle (por esa época no tenía ordenador cerca), y tuve ayuda de mis padres, pero hasta el equipo del colegio decía que ‘era culpa mía’.
En fín. Eso ya pasó 😉
Gracias Manu. No todo es denunciar, todos tenemos que poner un poco de lo que sepamos para mitigar esto 😀
Un post para enmarcar. Te felicito.
Todo esto esta muy bien. Pero… ¿para los adultos que sufren acoso sexual en la red? ¿hay que poner una denuncia a la policía o hay que seguir otro proceso? Un saludo Marcelino.
Efectivamente Daphne
Puedes usar esta dirección de correo, pero deberás formalizar la denuncia después en cualquier comisaria
delitos.tecnologicos@policia.es