¿Porque nos empeñamos en creer en que la gente es como queremos que sea en vez de como son en realidad?
Yo sé como soy y lo que no soy es:
– Un juguete para que lo uses 2 días y luego lo pongas encima del armario para que no lo toque nadie o en la caja con otro montón de ellos rotos
– Un trozo de madera para que hurgues con tu navaja y muestre la forma que tienes en la cabeza y si no te gusta lo eches a la hoguera
– Un móvil que lo enciendes cuando quieres, hablas con él y lo apagas si no te interesa lo que dice
– El tío que has visto en la serie que se pasa 200 capítulos para irse una vez a la cama con la que cree que quiere (me gustaría ver que pasa en el capítulo que nunca ruedan, el 201)
– Una maleta que te va a acompañar de viaje a Paris, Praga, Honolulu, Las Maldivas o donde se te ponga. Ya hace tiempo que descubrí que los paisajes son muy bonitos, pero son eso, paisajes.
Y sobre todo una cosa
Me he llevado tantas hostias que no quiero que nadie se lleve ninguna.
¿Para qué insistes?
Venga chica, mira en otro sitio. Vete a mirar otro escaparate.
Este no te conviene.
